No pude pensar en nada, en nadie.
Estuve todo el tiempo preguntándome un cómo, algún porqué y tal vez será.
Ahora que todo parece volver a la normalidad me siento peor de como estaba en la tarde.
No se por que y no quiero saberlo. La tranquilidad que de repente me da escuchar tu voz hace que de nuevo las ideas regresen a mi cabeza.
Y pude escribir...
Tal vez será que me estoy preocupando demasiado, tal vez será que estoy siendo posesivo e incluso paranoico.
La posibilidad que encuentro a eso es que te has convertido en algo más importante, único e irreemplazable.
Se que existe la posibilidad de estar exagerando, pero cuando algunas cosas se vuelven constantes y desaparecen sin aviso las extrañamos, añoramos.
Tu voz, tu mirada...
¿Será...?
No hay comentarios:
Publicar un comentario